Electroencefalograma: ¿En que consiste y en qué casos se recomienda este estudio?
¿Para que sirve?
El Electroencefalograma (EEG) sirve para observar el funcionamiento eléctrico cerebral. Es de interés conocer su normalidad o no en pacientes con alteración de las funciones cerebrales, bien de forma persistente o bien de modo episódico.
Puede detectar alteraciones de todo el cerebro o de algunas áreas. Sirve para observar alteraciones en lesiones (tumores, hemorragias, encefalitis, traumatismos entre otras) y lesiones difusas (tóxicas, metabólicas, infecciosas etc.).
Es fundamental realizar el EEG en pacientes cuyos síntomas o quejas sean deterioro del nivel de conciencia (somnolencia, estupor, coma), pérdida de facultades intelectuales (pérdida de memoria, demencia) o episodios que hagan sospechar crisis epilépticas (la epilepsia es una enfermedad en la que el cerebro descarga bruscamente impulsos eléctricos produciendo los ataques).
¿Cómo se realiza el estudio?
El EEG es un procedimiento sencillo. No requiere ninguna preparación especial ni ayuno.
Una vez colocados los electrodos al paciente (con un gorro de goma o plástico o con electrodos pegados individualmente), éste se sienta en un sillón y se comienza el registro de la actividad cerebral, que debe registrarse en reposo, con ojos cerrados y abiertos, y en maniobras de activación, como la hiperventilación (respiración profunda) durante 3 minutos, y la estimulación con una luz tipo flash a distintas frecuencias.
Finalizada la prueba, se retiran los electrodos y el paciente puede seguir sus actividades normales
Puede quedar algo de pasta en el pelo o la marca en la piel por la presión de los electrodos. Ambos problemas son mínimos y se solucionan en unos minutos, al peinar, y completamente al lavar la cabeza.
En ocasiones, hay que acudir al EEG después de haber dormido poco durante la noche anterior, lo puede solicitar el médico cuando se buscan algunas anomalías que se provocan con la falta de horas de sueño.
El electroencefalograma suele tener una duración de unos 15-25 minutos.
Únicamente no puede realizarse en pacientes con alergia a los materiales que se colocan adheridos al cuero cabelludo (pasta conductora, metal de los electrodos, plástico o goma del casco), lo cual es muy poco frecuente.